¿Por qué no dejo que Dios tome control?
- Pastor Israel Chapa Pérez
- 7 sept 2021
- 2 Min. de lectura

Dios te da la opción de depender de Él o de depender de ti mismo. El resultado es la libertad o la frustración.
“No permitan que el pecado controle la manera en que viven; no caigan ante los deseos pecaminosos. No dejen que ninguna parte de su cuerpo se convierta en un instrumento del mal para servir al pecado. En cambio, entréguense completamente a Dios, porque antes estaban muertos pero ahora tienen una vida nueva. Así que usen todo su cuerpo como un instrumento para hacer lo que es correcto para la gloria de Dios”, Romanos 6:12-13 (NTV).
Cada día algo te controla. Puede que seas controlado por tu propio ego o por las expectativas de otras personas. Puede ser que estés controlado por el miedo o por sentimientos de culpa, resentimientos o amargura. Puedes ser controlado por alguna sustancia o por hábitos.
La libertad viene cuando tú decides qué es lo que te va a controlar. Cuando decides que sea Jesucristo quien esté en control de tu vida, cuando estás sujeto al Maestro, tú puedes manejar todo lo demás. Si Dios no es el número uno en tu vida, algo sí lo es y ese algo tendrá el control sobre ti de manera dañina. Cuando Cristo está en control de tu vida, Él siempre te dirige en la dirección correcta.
Romanos 6:12-13 “No permitan que el pecado controle la manera en que viven; no caigan ante los deseos pecaminosos. No dejen que ninguna parte de su cuerpo se convierta en un instrumento del mal para servir al pecado. En cambio, entréguense completamente a Dios, porque antes estaban muertos pero ahora tienen una vida nueva. Así que usen todo su cuerpo como un instrumento para hacer lo que es correcto para la gloria de Dios”.
¿Cuáles son los pasos para dejar que Cristo controle tu vida?
- Admite que has estado jugando a ser Dios.
- Admite que tú solo no puede cambiar.
- Humildemente pide ayuda a Dios para cambiar.
- Habla sinceramente con alguien acerca de las cosas que necesitas cambiar en tu vida.
- Dale a Jesucristo el control absoluto de tu vida.
¿Estás seguro que quieres cambiar? ¿Estás dispuesto a hacer estas cosas? Si dices, “Estoy cansado de tratar y fracasar”, deja de tratar. En lugar de eso, comienza a confiar. Dios te da la opción de depender de Él o de depender de ti mismo. El resultado es la libertad o la frustración.
¿Por qué no entregarle todo a Cristo? ¿Qué puedes perder?
Reflexiona sobre esto:
- ¿Qué cosas de tu carácter o qué circunstancias te impiden darle el control de tu vida a Dios?
- ¿De qué manera has estado jugando a ser Dios?
- ¿Qué crees que significa entregarse completamente a Dios?
Comentários